(SAN JOSÉ, COSTA RICA, 19 DE MAYO, 2018-EL JORNAL).
Una maravilla de colores
Esta columna es seguida por amigos observadores y fotógrafos de aves, los que cuando logran tomar observar una buena especie, me la comparten para enriquecer este espacio
Ahora está el caso de Juan Pablo Badilla, quien, con su hábil pulso y cámara, logró esta fotografía, entre otras, de esta bella ave de nuestros bosques.
Se trata del “Rualdo” (Chlorophonia callophrys), que pertenece a la familia de las Tangaras, las que tienen los más lindos plumajes y cantos de los bosques tropicales. Esta es un ave pequeña, el macho de color verde sobre su espalda y alas, garganta y muslos. Pecho y abdomen amarillos. Su cabeza presenta una franja amarilla sobre sus ojos y coronilla azul claro. Pico amarillo pálido. La hembra es mayormente verde, con solo el abdomen amarillo y si la ceja amarilla sobre sus ojos.
Se reúnen en grupos de hasta seis. Rebuscan frutos pequeños como los del Matapalos, algunos insectos y arañas pequeñas. Se ubican en áreas aledañas a los bosques de altura, desde los niveles medios hasta los más altos, por ello son muy comunes en la Fila Agua Buena, Cerro Dragón y Cornelio, donde se les ha visto con más regularidad.
Esta ave tiene un canto muy melodioso, lo que lo hace muy susceptible para su captura como ave de jaula, además por su lindo plumaje.
El estilo de “Pajarear” es una actividad que llena de gozo, ya que salir al campo y poder avistar una linda especie en libertad y poder tomarle unas buenas fotos, hace que se sienta una satisfacción enorme, al saber que se disfruta sin hacer daño a las aves y a la naturaleza.
*Turismo Ornitológico / Licencia ICT #2423