(SAN JOSÉ, COSTA RICA, 11 DE MAYO, 2018-EL JORNAL). Este fin de semana realicé un tour de observación de aves en el hotel Portal de la Montaña, en sabanillas de Acosta. Los integrantes del grupo, europeos, estaban interesados en observar algunas aves de nuestra región, ya que, según me expresaron, les habían comentado de la belleza y abundancia de aves de Costa Rica.
Entrándonos a la zona boscosa del sendero, escuchamos varios cantos finos y sonidos rechinantes. Dentro de la vegetación, había varias especies de aves; yigüirros, soterréis, mozotillos, pero lo que más atrajo nuestra atención fue una pareja de Pinzones junto con un juvenil.
El Pinzón Piquinaranja (Arremon aurantirostris), de la familia de los gorriones y pico gruesos, es un ave residente de nuestros bosques de mediana elevación. De color verde oliváceo sobre su dorso y alas, garganta, pecho y abdomen blancos. Sobre su pecho una mancha negra a manera de cinta. Su cabeza, blanca brillante, con marcadas áreas negras en su ojos y coronilla. Pero lo que más resalta de este pinzón es su pico, ya que es de color anaranjado brillante, de donde algunos lugareños le dan el nombre común de Pico de oro.
Con la vista del Pinzón Piquinaranja lográbamos un nuevo registro en la región, lo que confirma la riqueza y la variedad de aves de esta zona del país.
Permanece a nivel del suelo, saltando entre los troncos y bejucos, en parejas o con juveniles. Se alimenta de insectos, arañas, semillas y algunos frutos.
Como su hábitat es el bosque denso y entre los bejucos y plantas bajas, en la oscuridad sobresale el color de su pico. Gracias a este aspecto físico es que lo pudimos observar y dejarnos una buena experiencia ante su belleza.
Salgamos a “Pajarear”, este estilo de vida de seguro lo sorprenderá con sus variadas especies que nuestros ecosistemas ofrecen.
*Turismo Ornitológico / Licencia ICT 2423
