(LUNES 17 DE OCTUBRE, 2022-EL JORNAL). Cuando se avecinan las tormentas solemos observar unas aves de color negro con alas puntiagudas que, en gran número, ágilmente surcan el cielo.
Los Vencejos, de la familia de los Apodiformes, (sin patas) son aves que por lo general nunca tocan el suelo. Estas aves son grandes voladoras y se les conoce como las aves más veloces del nuevo mundo y su vida está hecha para pasar en el aire, viajar largas distancias, alimentarse y hasta copular.
Su cuerpo aerodinámico, color negro azulado, las hace muy perceptibles en su vuelo, ya que cuando viajan lo hacen en grupos numerosos de hasta 100 individuos. Se alimentan de insectos que atrapan en vuelo.
Cuando sobrevuelan se les puede escuchar un chiflido, esta vocalización la hacen para comunicarse entre ellas. Su agilidad es tal, que a pesar de ser tan veloces y viajar en gran número no colisionan entre ellas, esto debido a su control de vuelo.
Cuando tocan suelo, lo hacen solamente en acantilados rocosos inaccesibles o detrás de cataratas, donde construyen sus nidos y depositan sus huevos. Estos nidos son construidos con saliva y fibras de hiervas que recogen ágilmente del suelo. En algunos países estos nidos son altamente cotizados como los mejores manjares de platillos en restaurantes de gran renombre. También se les dan supuestos poderes afrodisiacos como el caso del Macuá (Panyptila cayennesnsis)
En Costa Rica existen 10 especies residentes y una migratoria. El más grande de estos es el Vencejo Collarejo o Golondrón (Streptoprogne zonaris), mismo que es fácil de identificar por su color blanco en su cuello.
Adilio Antonio Zeledón Meza /Bach Gestión de Turismo Sostenible/Guía General licencia ICT 2423