(SAN JOSÉ, COSTA RICA, 28 DE SEPTIEMBRE, 2017-EL JORNAL). Ahora que se inició la migración de otoño, es un deleite salir a “Pajarear”. Cientos de especies nos llenan los bosques y jardines con sus cantos y plumajes.
Esta migración es monitoreada por expertos en todo sentido, y es que, en este fenómeno de la naturaleza, vienen especies que requieren de ciertas condiciones para su bienestar. Y es ahí donde, por medio de la cantidad de individuos y especies diferentes, son monitoreadas para evaluar su arribo.
Una especie, que es objeto de especial monitoreo, es la “Reinita Alidorada” (Vermivora chrysoptera). De tamaño pequeño, su plumaje gris sobre su dorso, abdomen y pecho blancos. De la base del pico le salen manchas negras hasta el cuello, en la hembra son más opacas estas manchas. Sobre sus alas, tienen mancha amarilla brillante, misma que les da su nombre popular. Sobre la coronilla una mancha amarilla. Pico puntiagudo y fino.
Se alimentan de larvas, insectos y arañas pequeños. Para buscar su alimento rebuscan entre las hojas de los árboles y matorrales, son muy inquietas, por lo que cuesta tomar una buena foto de ellas. Se ubican en zonas boscosas y sus bordes. Matorrales bajos y algunas áreas abiertas de crecimiento secundario.
Esta especie se encuentra bajo un proyecto centroamericano de conservación, ya que la reducción de su hábitat la ha puesto en peligro de extinción. Se han creado programas de conservación en procura de que esta especie no desaparezca.
La presencia de esta especie en Acosta, indica que ella encuentra bienestar para su estadía. Salga a pajarear y si tiene fortuna se topará con la reinita alidorada u otras fascinantes especies que nos visitan en esta parte del año.
*Turismo ornitológico
