(JUEVES 20 DE OCTUBRE, 2022-EL JORNAL). Visto lo que ha pasado con Kendall Waston desde hace ya bastante tiempo, tanto en Saprissa como en la Selección, ante la ausencia de un nueve en el equipo morado, el defensor central debe asumir esta posición de manera permanente.
Ayer fue la clave para que rescataran un punto y la serie en la agonía del partido, cuando ya Herediano hacía sus cálculos tras una magnífica victoria, pero su concurso como pivote habilitó a Ariel Rodríguez para que apagara la fiesta rojiamarilla.
Y luego vino una celebración inusual en un equipo que no gana en casa y que en teoría va con la serie comprometida si no anota en el Coyella Fonseca, pero se entiende porque el resultado fue una brisa fresca para los morados, quienes con la derrota llegaban muy comprometidos al juego del próximo sábado.
Waston ha dado tantos resultados como nueve, que ya es hora de que dejen de improvisarlo y lo devuelvan a su posición inicial. Así jugaba en Pérez Zeledón, por ejemplo, de centro delantero.
Con la Selección, en la eliminatoria y en amistosos, ha demostrado su valía como centro delantero, al estilo de los años ochentas y noventas, con algunas dosis de modernidad.
Saprissa tiene una gran delantera, pero, por paradoja, le falta gol, y esa labor la puede allanar Waston, si se desempeña como pivote, a lo que habría que añadir su poderío en las alturas.
Jeaustin Campos tiene en Waston un gran recurso, pero debe lanzarse desde las alturas y ubicarlo en el encuentro de vuelta, desde el minuto uno, como su nueve.
Ha jugado tantas veces ahí, y lo ha hecho también, que esta posibilidad no llega ni siquiera a la categoría de experimento: es aprovechar un recurso muy utilizado y que ha dado grandes resultados. Por el momento, ayer le salvó la serie a Saprissa.