(JUEVES 29 DE OCTUBRE, 2020-EL JORNAL). El neurocientífico español Joaquín Fuster recién publicó su libro «El telar mágico de la mente», en la que hace un recorrido por su vida y por el estudio del cerebro al que ha dedicado todo su esfuerzo profesional.
La obra tiene relevancia debido a que la neurociencia es una de las áreas del conocimiento que más interés ha despertado en las últimas dos décadas.
En una entrevista con EL CULTURAL, Fuster expresó: «“La neurociencia de la mente -explica- es como un gran tapiz, que hay que mirar a cierta distancia para apreciar bien. Si se mira demasiado de cerca se nos pierde el esplendor de los colores, las perspectivas y los claroscuros. En la cognición, como en la emoción, la relación lo define todo de un extremo al otro».
Para el nuerocientífico, hay un hecho capital en todo lo concerniente a la memoria y que debe entenderse a cabalidad: «El código de la memoria, como el de la percepción y el de cualquier otra función cognitiva, es un código relacional. Es información entretejida y definida por las relaciones entre estímulos, entre eventos, entre acciones, entre memorias, entre palabras, y por lo tanto, entre sus respectivos sustratos nerviosos».
