(VIERNES 06 DE ENERO 2023-EL JORNAL). David Beckham no solo era un buen jugador en la cancha, sino que era un mago de las finanzas fuera de ella.
Cuando fichó por la MLS estadounidense, hizo un contrato que por elementos extradeportivos le reportaron en el tiempo $500 millones, lo que es una muestra de cómo una buena negociación va más allá de las cifras absolutas.
El mundo del fútbol se conmovió en 2007 cuando Beckham dejó el Real Madrid para ganar $6,5 millones por temporada, menos de lo que percibía en el equipo Meregengue, pero dos cláusulas secretas le permitieron amasar una fortuna.
Entre las cláusulas firmadas por el futbolista, según informa Marca, se encontraba el ingreso porcentual por entradas vendidas, camisetas y otro tipo de accesorios, así como el poder comprar una franquicia de la MLS por solo $25 millones.
Así que con el paso del tiempo, aquel contrato que parecía pequeño para las aspiraciones de Beckham terminó redondeándose a más de $500 millones, en un ejemplo maestro de cómo moverse en el ámbito del fútbol con destreza y visión de futuro.