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El gesto de Bellingham

(JUEVES 30 DE NOVIEMBRE-EL JORNAL). La solidaridad es un elemento raro en el fútbol y en la vida,a aunque se pregone a cada instante. Y si tienen dudas, pregúntenle a Jeaustin Campos, que hoy es una isla y si estuviéramos en tiempos bíblicos, sería un leproso.

En medio de todo el ruido y la hipocresía que se derrochan a raudales en el balompié, ayer en el partido Real Madrid-Nápoles sucedió una situación extraordinaria, digna de resaltarse y aplaudirse.

Al minuto 56 del juego, entró el delantero Joselu Mato como referencia en ataque del equipo blanco y conforme pasaron los minutos llegaron las oportunidades, dos de ellas clarísimas de gol, y el atacante en ninguno de los casos atinó.

Opciones que ni siquera un juvenil podría haber fallado. La grada del Santiago Bernabéu, lejos de abuchearlo, lo respaldó y le mostró su apoyo, con el fin de que el futbolista levantara cabeza.

A falta de ocho minutos le quedó un remate de cabeza, ya sin portero, y Joselu, una vez más, lanzó el balón fuera del marco. Ni el propio jugador podía creer aquello y la pesadilla que estaba sufriendo.

Fue entonces cuando un joven de 20 años, que lleva la camiseta 5, que alguna vez vistió Zinedine Zidane en el Real Madrid, apareció para hacer uno de los gestos más hermosos y solidarios que haya visto en la última década en el fútbol.

Jude Belligham se inventó una jugada por el costado izquierdo, ya en el minuto 90, y cuando tenía opciones de rematar, observó que Joselu cerraba por el costado derecho, pero la acción no era tan fácil como al final resultó, y fue cuando se inventó un pase al estilo Modrić y dejó a Joselu de cara al gol, de modo que no hubiera forma humana de fallar.

Como un crack que es, Bellingham no se conformó con hacer anotar a su compañero, sino que lo empujó para que fuera a festejar a un esquina con su afición. Literalmente lo empujó para que toda la gloria fuera del delantero gallego.

Un gesto extraordinario, digno de un veterano, solo que Bellingham tiene apenas 20 años.

En el mar de egos que es el fútbol, el gesto de Bellingham engrandece el balompié y por un instante invita a pensar que la solidaridad y el compromiso son posibles.

Periodista, escritor y comentarista. Premio Nacional de Periodismo Pío Víquez. Esta columna se publica a diario en FXD y EL JORNAL

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