(SAN JOSÉ, COSTA RICA, MARTES 11 DE AGOSTO, 2020-EL JORNAL). Hay golpes que pueden cambiar el curso de los acontecimientos. Lo demuestra la historia a diario. Y el fútbol, como parte de la sociedad, no está exento de ello. San Carlos le ha dado, con la contratación de Javon East, un giro de 180 grados al Apertura, sin que este siquiera haya comenzado.
Javon es el as bajo de oros bajo la manga que cualquiera desearía tener cuando la partida se pone espesa, cuando el horizonte empieza a oscurecer o cuando se requiere ese algo que tiene todo arte y que lo diferencia del resto, como dijera con tanta sabiduría el filósoso español José Ortega y Gasset.
Es un jugador inteligente, con una gran movilidad en ataque y con gol, y junto a Julio Cruz y Jorman Aguilar harán del ataque de los Toros del Norte uno de los mejores del certamen.
Si a ello se le auna que Carlos Restrepo ha tenido ya un tiempo prudencial para armar su equipo y que cuenta con futbolistas como Esteban Ramírez, Jefrey Valverde, Marvin Obando y la experiencia de un Carlos Acosta, el cuadro norteño está llamado a pelearle esa clasificación a A Cartaginés y Saprissa, que se perfilan como los rivales más fuertes de su grupo.
Su presencia le dará a la ofensiva de los sancarleños esa chispa de más, ese anticiparse a las jugadas y una entrega extraordinaria, como lo demostró el jamaiquino en el Santos de Guápiles.
El delantero jamaiquino confirmó en el Santos, una vez más, que los buenos jugadores no necesitan un año de adaptación, que con unos cuantos trazos y unas pocas señales van por el camino correcto.
Tanto Javon como Maalique Foster prácticamente no hablaban una palabra de español cuando llegaron a Costa Rica, pero en pocas semanas eran los referentes en el ataque rojo.
San Carlos ha hecho una magnífica contratación tras la sorpresiva salida de Saborío a la Liga: ganó juventud, gol y un jugador que entiende el ajedrez del fútbol a la perfección.
Ahora lo que necesitará el equipo es esa ambición de superar a cuanto rival se encuentre a su paso. Tienen la plantilla para hacerlo. Y ese proceder le dará al campeonato un ingrediente adicional y fascinante.
El enroque de llevarse a Javon y dejar salir a Álvaro Saborío es una jugada maestra en tiempos de coronavirus. El fútbol se gana también fuera de la cancha, aunque hay una vieja guardia de dirigentes que no alcanzan a entender esta dimensión y siguen jugando a las cartas a ciegas, mientras en el mundo se suscitan hallazgos y avances que superan a la ciencia ficción.
*El autor es periodista, escritor y comentarista. Premio Nacional de Periodismo Pío Víquez.