OIJ exime de responsabilidad al alcalde Víctor Morales y al tesorero, a quienes les falsificaron las firmas
(San José, sábado 16 de junio, 2012). El robo de ¢33 millones en cheques de la municipalidad de Aserrí en junio de 2011 sigue sin esclarecerse a un año de ocurrido el suceso, confirmó a El Jornal la regidora independiente Sonia Aguilar.
El jueves 7 de junio una comisión del municipio, encabezada por el alcalde Víctor Morales, visitó al Organismo de Investigación Judicial (OIJ) en sus oficinas centrales y los investigadores explicaron que todavía no saben quién se robó esa suma de dinero en cheques de un millón, los cuales fueron cambiados en el Banco Nacional (27 de ellos) y en el Banco de Costa Rica (los seis restantes).
Aguilar detalló que el único avance es que se esclareció que las firmas del contador del municipio y del alcalde fueron falsificadas, con lo cual ambos funcionarios quedan eximidos de cualquier sospecha.
Los cheques fueron sustraídos del archivo ubicado en el nuevo edificio municipal, por lo que Morales en su oportunidad sostuvo que “sospechaban de un gato casero”.
Como primera medida el ayuntamiento prescindió del contrato que tenía con la empresa de seguridad, pero a un año del robo, todavía no hay luces de quién o quiénes se quedaron con el dinero del pueblo aserriceño.
Ya antes de este robo se habían desaparecido tres millones de la misma forma, por lo que todo apunta a que fue alguien de “adentro” o que contó con la colaboración de alguien de adentro para poder perpetrar el robo.
“Hemos estado muy pendientes de lo del robo, pero parece que el OIJ cree que lo que se llevaron fue simplemente un mueble viejo”, dijo Zamora.
Explicó que “logramos que la investigación se amplíe con el fin de que se llegue a conocer qué fue lo que realmente sucedió”.
Parte de ese dinero iba a ser destinado, en su oportunidad, al Comité de Deportes.