Entrega  número uno de una amplia y valiosa serie sobre el amor, la amistad, los sueños y la vida

(MARTES 29 DE NOVIEMBRE 2022-EL JORNAL).

Querida Amiga

Aquí, como siempre, enamorada del amor y aunque se puede vivir plenamente disfrutando y crecer en soledad, prefiero contar siempre  con un buen compañero a mi lado, y hoy quiero compartir con usted algunos asuntos de lo que llamamos amor.

Ayer, mirándome al espejo, me preguntaba qué sería de mi vida sino estuviera al lado de este hombre,  mi amigo, mi esposo, mi compañero incondicional, esta persona que aparece en mi vida y que con su actitud me hace creer nuevamente que existen  buenas razones para compartir en pareja y comprender que todos ellos son diferentes: no todos son como aquellos que nos causaron tanto daño. 

Me pregunto si soy feliz y, sí, realmente lo soy, por primera vez, soy quien soy, soy yo misma, actúo sin miedo, sin tapujos, sin ser señalada, juzgada ni ridiculizada por mi forma de actuar.

Usted recuerda la forma en que me obligaba Rodrigo a compartir con la gente que él quería y cómo se molestaba sino consumía lo que me pedía, y recuerdo sus cambios de comportamientos dulce, amable y cariñoso en presencia de otra gente, ofensivo, con actitudes de maltrato, golpes y miles de agresiones físicas y psicológicas cuando menos lo esperaba, momentos que pudieron ser horribles: sino no hubiera sido capaz de buscar ayuda para aprender a valorarme y recobrar mi autoestima.

Amiga, si retomamos cada una de nuestras relaciones de pareja y de otras mujeres como Rosita, Aurora, Eva, Amelia, Julia, Raquel, Lilliana, Susana, Alicia, Martha; entre otras, tenemos mucho de qué hablar sin dejar de lado las anécdotas e historias perfectas de amor de aquellos hombres que también han sufrido desilusiones e infidelidades, terminando con un corazón o en soledad reviviendo los fantasmas del pasado.

Amiga mía, somos una, nos conocemos muy bien, y aunque el tiempo pasa y todo cambia, existen momentos que no se pueden olvidar. 

Saludos,

Carmen C.

 

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