EL PLACER DEL TEXTO
(SAN JOSÉ, COSTA RICA, 16 DE MARZO, 2016-EL JORNAL). El periodismo está podrido. Por los muchos imbéciles que hay en las redacciones. Por los analfabetos funcionales. Por los que nunca han oído, ni oirán, hablar de ética. Porque al periodismo se lo tragó la tierra con el advenimiento supremo de la corrupción y la estupidez. Y, finalmente, por la falta de compromiso con la sociedad a la que sirve.
Así empecé un artículo literario sobre la última novela publicada por Umberto Eco, referida al periodismo. Y si Eco viviera en este instante, se moriría de la risa de que la principal televisora de Costa Rica le diera un total de 11 minutos a un personaje que solo puede argumentar incongruencias, sobre un tema tan serio como el consumo de la marihuana.
Antes en los periódicos y las televisoras para que entrevistaran a profundidad a alguien, era necesario labrarse un prestigio académico en su campo de estudio, de modo que la persona, antes de ser abordada, hubiese demostrado, de sobra, sus vastos conocimientos en una determinada área.
No obstante, Canal 7, en una de sus ediciones estelares le dedica un tiempo valiosísimo a una joven que se hace llamar “La Tocola” o la «Rockola», y en efecto, escuchándola hablar le hace honor a su apodo, porque su lenguaje es más que limitado, y si por la víspera se saca el día, quizá la entrevistada se ha leído el horóscopo unas tres veces en su vida, y esa ha sido su mayor aventura intelectual.
El hecho de que vídeo de la «Tocola» o la «Rockola» lo haya visto un determinado número de personas en Youtube, no significa nada más que eso. Y no se puede jugar con el tema de la marihuana al argumentar que hay una doble moral detrás de él.
He escuchado testimonios de personas que empezaron por la marihuana, siguieron por la cocaína, pasaron a la heroína, el cemento y finalmente consumieron el crack, y estuvieron en la línea de fuego entre la vida y la muerte, solo porque un día les pudo más la curiosidad.
A la pobre joven, que sale a exhibir su incultura, su pobreza intelectual, y, en suma, su ignorancia, no ha de culparse, si ya sabemos que en esta sociedad de la información cada cual puede decir lo que se le antoje, lo lamentable es que el director de telenoticias, Ignacio Santos, haya autorizado una entrevista de ese calibre.
Profunda. Cargada de ironía: Número Cero es una gran metáfora del periodismo actual, en el que la superficialidad, el poder del dinero, la corrupción, y los intereses que rodean a los medios acorralan a la ética y a la verdadera razón de ser del oficio: informar sobre la base de un ejercicio serio, contrastado, responsable, y alejarse de las tendencias en las que todo se mide en clips, y se olvida que detrás de cada noticia hay seres humanos que respiran, sueñan, sufren, y van al supermercado….
Les juro que no sospechaba que un tratamiento de un tema tan serio como el consumo de marihuana se iba a convertir en un circo sombrío del pensamiento. Vaya si es notorio el ascenso de la estupidez.