(VIERNES 21 DE JUNIO, 2024- EL JORNAL). La Eurocopa está en marcha y ayer recién comenzó la Copa América y aunque en el Viejo Continente por lo general hay mejores selecciones tanto colectiva como individualmente, esa apertura entre Argentina-Canadá no tiene nada que envidiarle al nivel de los europeos.
Canadá, que es una selección ubicada en nuestra zona, realizó un excelente partido, aunque pagó caro sus falencias en la zaga, la parte más endeble del conjunto norteamericano.
Por largos tramos le jugó de igual a igual a Argentina, que desde luego es un equipo más que trabajado y cuyos jugadores se saben de memoria el libreto.
Observando el desempeño de los canadienses, dirigidos por Jesse Marsch, está claro que nuestro fútbol está un peldaño más abajo.
De ahí que las declaraciones dadas ayer, jueves, por el Director de Selecciones Nacionales, Claudio Vivas, no se entienden del todo. Por un lado dijo que había que competir y por otro que era necesario entender la etapa en que está el equipo costarricense.
O es agua o es aceite. ¿Se puede competir al más alto nivel? O se asume que no se está en dicho nivel y entonces la estrategia, en ese caso, cambia radicalmente. Ese ejercicio de hablar sin claridad, al que es muy dado Vivas, cansa, porque son necesario discursos contundentes y no enrevesados.
El fútbol no requiere de tantos galimatías. Debería entenderse que con los jugadores que hay y el momento en que está el seleccionado, a lo sumo se puede afinar la idea que elija el técnico y no más.
Dar la sensación de que se debería pasar a segunda ronda en la Copa América, cuando se tiene a Brasil y Colombia al frente, es inflar demasiado las expectativas.
Pies en la tierra. Trabajo claro. Objetivos alcanzables, porque me niego a utilizar el término proceso, tan vilipendiado en Costa Rica, que bien haría la RAE si lo saca sde su repertorio cuando de nuestro país se trata.
Periodista, escritor y comentarista. Premio Nacional de Periodismo Pío Víquez. Esta columna se publica a diario en FXD y EL JORNAL