(JUEVES 09 DE DICEIMBRE, 2021-EL JORNAL). Se ha consumado la crónica de una decadencia anunciada: el Barcelona ha descendido a la Segunda División europea, llamada eufemísticamente Europa League.
El remezón sería una anécdota si no tuviera conexiones con el fútbol de Costa Rica, que ha seguido un guion similar al azulgrana, con improvisaciones, ocurrencias, liturgias insostenibles y promesas ilusiorias que se deshacen cuando amanece el día.
En medio de ese ambiente se disputará esta noche el primero de dos encuentros de la final de la segunda fase del Apertura 2021 y a pesar de que son Saprissa y la Liga, no hay una expectativa desbordante, como en otros tiempos, quizá porque el aficionado sabe que no todo marcha como debiera en el fútbol nacional.
Y como en el caso azulgrana, si hay algunos demonios equívocamente invocados, como la presió innecesaria a los árbitros, que son lo tan profesionales que pueden ser en un fútbol que los trata como amateurs.
Entre las sombras planea que el seleccionado, al día de hoy, ocupa el quinto lugar en la octoganal, a cinco puntos de una Panamá que llegó casi como última invitada, pero que ha sabido sacarle provecho a la oportunidad que se le presentó de subirse al avión de Catar 2022.
La teoría indica que Saprissa, por sensaciones e incluso las frías estadísticas, llega mejor que Alajuelense, que superó al Santos solo por el gol doble en caso de empate, pero quedó claro, en especial para los manudos, que el equipo dirigido por Albert Rudé no fue mejor que el guiado por Erick Rodríguez.
Y las sensaciones, que no son otra cosa que eso, porque no tienen una base científica, muchas veces marcan el camino en el fútbol, dado que en este deporte el azar juega un papel preponderante, como lo consignó hace unos años la Premier League, donde demostraron que tenía una incidencia del 47 por ciento en los resultados.
El clima que se percibe en torno a la final, con un horario televisivo poco viable para el aficionado de a pie, que es el más importante y el que siempre se sacrifica por su club, es un tanto frío, como si quisiera estar en consonancia con los aires decembrinos del momento.
Una vez que ruede la pelota, eso sí, espero que haya una gran partida de ajderez en el rectángulo del Ricardo Saprissa así como en el del Morera Soto: calidad existe en el país, lo que hay que hacer es orientar este fútbol hacia altas metas, para evitar que a los equipos y en especial a la Selección Nacional, le pase lo que hoy vive el Barcelona, que incluso es motivo de mofa en los programas de fútbol británicos, donde el humor ácido corre por cuenta de los otrora reyes de Europa, ahora guiados por Xavi Cruyff Hernández, quien ya comprobó en su propia piel, que en el fútbol los milagros no existen y por ende hay que apelar al sí mágico código de la repetición: que obra maravillas con la base del trabajo como pócima insustituible.
