(MARTES 20 DE ABRIL, 2021-EL JORNAL). Florentino Pérez, Presidente de la Superliga, le confesaba a Jordi Évole en 2014, que su empresa para entonces facturaba entre 105 y 109 millones de euros al día, incluidos sábados y domingos, y que por lo tanto ACS generaba al año cerca de 39.000 millones de euros.
El Florentino Pérez que le hacía esta confesión a Évole, es el mismo que ha salido a promover la Superliga, con el argumento de que los grandes clubes de Europa están urgidos de dinero y que no pueden esperar más.
El que promotor principal de la Superliga, por ende, no es un hombre que tuvo una ocurrencia y se dedicidió ayer a construir metros subterráneos por el mundo, no, es todo lo contrario, un hombre de negocios en toda regla, y si está convencido de que los grandes equipos necesitan reiventar el negocio, hay que ponerle atención.
Los muchos detractores de la Superliga han salido a argumentar que se olvida de los equipos pequeños de Europa, lo que no es cierto en un cien por ciento, toda vez que habrá un fondo común que saldrá de la Superliga, al tiempo que si esos clubes pequeños son inteligentes y se dedican a producir jugadores, podrían hacer el negocio de sus vidas.
Cada equipo de la Superliga, que integrarían Real Madrid, Barcelona, Atlético de Madrid, Liverpool, Manchester United, Manchester City, Tottenham, Chalsea, Arsenal, Milán, Juventus e Inter de Milán, de entrada se garantizará un ingreso de 350 millones de euros, que es como si ganara la Champions tres veces.
El fútbol hoy, querrámoslo o no, es un negocio puro y duro. Los románticos tenemos que saber que además de fútbol existen la ‘play station’.
El mundo ha cambiado, cambia a cada instante, y eso lo sabe a las mil maravillas Florentino Pérez, que cuenta en esa entrevista que a principios del siglo XXI, el Real Madrid ingresaba 100 millones de euros y perdía plata, entonces, él se trajo a Figo del Barcelona e incorporó a Ronaldo y la ecuación cambió a favor del equipo blanco de manera significativa.
Son negocios, hay que entenderlo, por favor. Ojalá que los federativos costarricenses, con Rodolfo Villalobos a la cabeza, tengan acceso a Internet y se enteren de cómo se maneja el fútbol en los tiempos modernos.
Periodista, escritor y comentarista. Premio Nacional de Periodismo Pío Víquez.