(SAN JOSÉ, COSTA RICA, 20 DE NOVIEMBRE, 2018-EL JORNAL). La ausencia física del presidente estadounidense, Donald Trump, en la XXVI Cumbre Iberoamericana celebrada en Guatemala, jugó una mala pasada al Jefe de Estado costarricense, Carlos Alvarado, que a juzgar por las críticas internacionales, no aprobó el examen de debutante en la gran carpa de la política hemisférica.
Con antelación a celebrarse este cónclave todos sabíamos que los 15 presidentes iberoamericanos y las 22 delegaciones estatales buscarían una atmósfera no confortativa para no echar más leña a la hoguera mundial y bajar las tensiones internas que viven la mayoría de las naciones asistentes, según documento hecho llegar a El Jornal por colegas guatemaltecos.
Este común interés también buscaba apaciguar las innegables contradicciones éticas que enfrenta la diplomacia occidental. España, Francia y Canadá, por ejemplo, llaman a respetar los derechos humanos; mas sin embargo se niegan a suspender la venta de armas a la monarquía saudí, que insiste en “matar de hambre” a la población de Yemén; tampoco abandonan su destrucción en Siria.
El presidente Alvarado, asesorado por no se sabe cuál experto, dirigió de entrada, al mejor estilo Trump- que como se dijo, su presencia era innecesaria en la Cumbre y él pasaría ocupado con las alambradas fronterizas con México- la emprendió contra Nicaragua y Venezuela, diciéndoles de paso, cómo debían hacer las cosas internamente .
El presidente Daniel Ortega a última hora canceló su asistencia para atender reuniones que buscan paliar pérdidas por más de $5000 millones que dejaron los pasados actos violentos, mientras el gobernante Nicolás Maduro prefería la entrega a gente humilde de la vivienda 2. 300.000, desde el Cuartel de la montaña, en la capital venezolana.
De hecho la diplomacia nicaragüense contestó de inmediato a Alvarado, a quien pidió respeto por el derecho ajeno y los principios de autodeterminación de cada Estado.
El amplio documento de la cancillería nicaragüense, de la que tiene copia este periódico, no es ni la sombra de la versión informativa que circuló el diario La Nación, que entresacó textos que convenían, de un contexto mucho más amplio.
“ El señor presidente de Costa Rica – explicaba desde el principio- rompiendo con la premisa de la XXVI Cumbre Iberoamericana de Antigua Guatemala, que proclama el respeto a la soberanía de los Estados y la no injerencia en los asuntos internos, actuando como ficha de la política injerencista de los Estados Unidos, llegó a la mesa de tan importante evento, con disonancias atrevidas, ridículos aires de grandeza, posiciones pretensiosas y voces de superioridad pro-imperialistas, incompatibles con el respeto al derecho ajeno”.
Por otra parte, el canciller de la República Bolivariana de Venezuela, Jorge Arreaza, terminó de coronar el infortunado debut de nuestro Presidente en la arena internacional, al contestar las aseveraciones hechas por Alvarado sobre el país suramericano, con un respetuoso humor y un fino lenguaje que arrancó aplausos.
Arreasa, recordando que estas Cumbre van más allá de “la polarización política en América Latina”, lamentó la “nota disonante” de Alvarado en el cónclave y consideró que todas las naciones tienen problemas internos, incluso Costa Rica, pero que a menudo, Nicaragua y su país, sirven de cortina de humo.
Hay naciones donde se juntan narcotráfico, el contrabando, el paramilitarismo; pero en todo caso “quiero decirle (a Alvarado) que nuestro Presidente obrero fue un sindicalista muy reconocido y se pone a la orden del gobierno de Costa Rica para que logren entablar un diálogo social respetuoso con los trabajadores que tienen más de 68 días en huelga ante la reforma fiscal. Solo ofrecemos nuestros buenos oficios al respecto”, dijo.
La forma elegante como Arreaza mandó a dialogar con los maestros a Alvarado y la humillación a que cualquiera se expone cuando tiene techado de vidrio, no solo llenó las redes sociales, sino que arrancó admiración entre algunos diplomáticos por la fina crítica y la cuota exacta de humor que puso el diplomático.
SIN RESOLVER
Durante la cumbre quedó en evidencia que ninguno de los países asistentes está exento de problemas serios. España, que hizo alusión al entendimiento, tiene en el resurgimiento del franquismo y la independencia de Cataluña, dos de sus mayores desafíos históricos.
Canadá dice defender el ambiente y no hace nada para detener la minería de sus compañías, que hacen estragos en toda América; Colombia, es la nación suramericana, seguida por Perú y Brasil con más emigrantes, según la Organización internacional de las Migraciones. Casi 5.000.000 de colombianos huyeron en busca de mejor vida o para salvar su pellejo.
Las condiciones desmejoradas en Venezuela por el bloqueo económico, promueve también que algunos de sus habitantes – son más los colombianos en Venezuela que venezolanos en suelo colombiano- pasen a Colombia en busca de medicina y salud; mientras en Centroamérica, cientos de hondureños y guatemaltecos se sienten perseguidos y buscan oportunidades en Norteamérica.
Costa Rica, con todo su modelo, sigue sin resolver la alta criminalidad, la pobreza, la miseria extrema, los bajos salarios, el elevado costo de la vida, la falta de vivienda y la corrupción (ver recuadro).
En este marco de grandes perdedores, debe rescatarse un ganador innegable: el mandatario de Bolivia, Evo Morales, además de trasladar su experiencia a los guatemaltecos en cuanto a crecimiento con dignidad – consultar cifras del Banco Mundial- regresó a la Paz con un Honoris Causa debajo del brazo, otorgado por la prestigiosa U de San Marcos. ¡Nos come la envidia¡
PLAN FISCAL Y CORRUPCIÓN
Monto.
Caso Caja Fischel: $ 32.000.000
Caso Alcatel: $ 60.000.000.
Caso Trocha: $ 45.000.000.
Caso Soresco: $ 45.000.000.
Caso OAS: $ 32.000.000
Caso Yamber: $ 37.000.000.
Caso Cemento chino: $ 30.000.000
Caso Hidrotárcoles: $ 117.000.000
Caso Coopelesca: $ 35.000.000.
Total:$433.000.000 = ¢ 248.900.000.000,oo.
*El autor es abogado y periodista.
Nota: Montos confeccionados y publicados por Blanca Gutiérrez Aguilar, quien ha estudiado a fondo la corrupción en Costa Rica, el lunes 12 de noviembre de 2018.