(JUEVES 04 DE MAYO 2023-EL JORNAL). Las declaraciones de Claudio Vivas en relación con Aarón Suárez son torpes e innecesarias.
Vivas dijo: “Es un futbolista que si tuviera 10 centímetros más podría estar tranquilamente jugando en Europa o en otra liga, pero lamentablemente ese físico le sirve para ser un jugador destacado acá”.
Suárez mide 1.62 centímetros y no le vendrían mal diez más, como lo sostiene Vivas, pero de ahí a ‘condenarlo’ por su tamaño es desconocer la esencia del fútbol.
El balompié es universal porque es el gran deporte en el mundo que permite que todos los talentos, de todos los colores y estaturas, puedan entrar a un campo de fútbol y hacer maravillas.
Por lo tanto, afirmar que el futbolista, por su estatura, puede desarrollar una carrera en Costa Rica, pero que no le alcanza para llegar a Europa es pretencioso, atrevido y oscuro, porque es meterse en un túnel sin salida.
Habría que recordarle a Vivas lo que decían los griegos hace 2500 años: “El hombre es la medida de todas las cosas”. Puesto ahí en el centro del mundo, ha sido capaz la especie humana de conquistar el espacio, y mientras él hacía esas declaraciones, reitero, muy torpes, los satélites de la NASA hurgaban en los anillos de Saturno en busca de nuevas pruebas sobre la grandeza de la creación.
De modo tal, que Vivas se retrató a sí mismo y dejó entrever que de pedagogo no tiene absolutamente nada. En vez de descalificar, con intención o sin ella, le hubiera dado vuelta al discurso para desafiar a Suárez a que cruce el charco y lleve su fútbol al Viejo Continente.
Hoy, ni ayer, ni mañana, el discurso de los biotipos triunfará, porque el hombre tiene la capacidad camaleónica de inventarse una y mil veces.
Solo un dato para que el señor Vivas empiece a informarse: Alejandro Morera Soto, ese gran delantero costarricense que a comienzos de los años 30 del siglo pasado jugó en un Barcelona que entonces era mejor que el Real Madrid, medía 1.65 centímetros. En teoría, solo tres centímetros más que Suárez.
Y como diría Emilio Duró, conferencista empresarial súper exitoso: no sigo para no hundirlo, porque lo que dijo Vivas sobre Suárez es una torpeza más grande que una catedral.
