(SAN JOSÉ, 13 DE MAYO, 2014-EL JORNAL). La harina de café, elaborada a partir de la pulpa del grano, podría ser uno de los productos que tenga un gran impacto en el mercado internacional y que contribuya a solucionar un problema de contaminación.
Así lo informa hoy en uno de sus reportajes el periódico británico The Guardian, el cual precisa que el ingeniero Dan Belliveau ha desarrollado este nuevo producto tras dos años de investigación.
La pulpa del café, conocida en Costa Rica como broza, en los últimos años se ha empleado en producir te o como fertilizante, pero una gran porción se desaprovecha en el mundo.
De tener éxito el invento de Belliveau, la harina del café serviría para hacer galletas, chocolate, caramelos, “brownies” y granola, entre otros productos.
Algunas de las fincas involucradas en el experimento de producir esa harina se encuentran localizadas, siempre según la fuente citada, en México y Nicaragua.
Un estudio de la Universidad de Costa Rica (UCR) de 2012, realizado por Elba Cubero Castillo, determinó que la broza tiene propiedades antioxidantes, lo que ayudaría a prevenir males cardiovasculares y enfermedades cancerosas.