Rafael A Ugalde Quirós
rafaelangelu@yahoo.com
(SAN JOSÉ, 07 DE DICIEMBRE, 2013). Miré por la televisión internacional el socollón político causado por la desaparición física de Nelson Mandela y su sonrisa solidaria.
No hubo una personalidad con influencia en el “mundo desarrollado” que no coincidiera en que Mandela encarnó la lucha por la dignidad humana.
Vienen entonces a mi memoria aquellas acusaciones contra Mandela, el “terrorista africano”, el “comunista”, etc., por parte de Estados Unidos, Gran Bretaña, Holanda, Portugal, entre otros.
Estos gobiernos y sus aliados- incluyo a Costa Rica, la “democrática” y “abanderada” en derechos humanos-, no movieron un dedo para exigir la liberación de aquel hombre víctima del “aparthied”, posiblemente a la espera de que se pudriera en sus mazmorras.
Por eso recuerdo un artículo publicado en su momento en el Semanario Universidad contra el “aparthied”, por el cual mi amigo y ex director, Carlos Morales, se compró tremenda bronca con algunos “demócratas” del claustro.
Quizá la muerte de este “exterrorista” los lleve a recordar que el pueblo de Sudáfrica es primero víctima inocente de los portugueses, luego de los holandeses y, por último, de los británicos
Todos estos señores de Europa se confabularon para tratar de borrar cientos de años de historia, y “fabricar” la suya “blanca” y “civilizada” .
¿Mueren, acaso, hombres como Mandela?
Periodista, abogado y notario UCR.