Inicio Deportes El gol del VA...

El gol del VAR

(JUEVES 28 DE OCTUBRE, 2024-EL JORNAL). El VAR va de mal en peor en Costa Rica. La gran herramienta, que vendría a generar «justicia» en el fútbol va de error en error. Es una especie de charanga que hoy se equivoca y mañana también.

El gol que le validan a San Carlos, la noche del sábado, en el Morera Soto es un contrasentido. El juez de línea levanta la bandera en señal de que César Yanis está en fuera de juego, y eso automáticamente hace que la mayoría de los jugadores desistan de la jugada.

Luego de la revisión el VAR da gol. Es el mundo al revés. Alajuelense, aunque haya ganado el encuentro, debe presentar una queja formal al VAR, porque el actuar es inadmisible.

De igual manera, ayer le anularon un gol a Herediano, el cuarto, porque supuestamente la bola no estaba quieta, cuando se ve claramente la voluntad del futbolista Gerson Torres de parar y luego mover el balón.

El VAR en Costa Rica es un ornitorrinco que no tien pies ni cabeza. Da pena ver lo que están haciendo de cómo están convirtiendo el fútbol en otro deporte a vista y paciencia de los presidentes del fútbol nacional, con excepción de Jafet Soto.

Dicho lo anterior, el estar de acuerdo con Soto, ya evidencia que algo anda muy mal en el balompié costarricense, pero en este caso del VAR lleva razón en algunos aspectos.

Es el mundo al revés. Ya lo había dicho Enrique Santos Discépolo en su histórico tango.

Hoy resulta que es lo mismo ser

 derecho que traidor, ignorante,

sabio, chorro, generoso, estafador.

¡Todo es igual, nada es mejor, lo mismo un burro que un gran profesor!

El VAR vino a reventar la poquísima coherencia que había en el fútbol de Costa Rica y lo ha convertido en una cháchara.

Periodista, escritor y comentarista. Premio Nacional de Periodismo Pío Víquez. Esta columna se publica a diario en FXD y EL JORNAL

Artículo anterior¿Los presidentes ceden el poder?
Artículo siguienteLas palabras de Rónald González

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí