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Menú para adjudicarse el “Magón”

La escritora Carmen Naranjo ganó el Premio Magón en 1986.
Lic. Rafael Ugalde Quirós.

 

ENSAYO

 

A la memoria del Dr. “Chalito” Vargas, anestesiólogo, homeópata, universal y hombre excepcional para nuestro país, en todas las dimensiones. Tarea cumplida, obras subrayadas con crayón amarillo

  1. De ideología, premios y premiados. De seguir paso a paso esta especie de “manual” para un sabroso menú “, seguramente en 2021 usted estará en la Sala Magón del Centro Nacional de la Cultura (CENAC) entre los selectos escogidos, recibiendo honores oficiales por fomentar la trascendencia humana y las nobles metas, según la Ley 2901 de 1961 y su reforma de 1993 que creó el  codiciado premio “Magón”. A continuación  se ofrece nombres de algunos quienes  marcaron un nuevo camino de “ver”[1]  sin arquetipos a su pueblo. Otros lo reforzaron. Pido, eso sí, paciencia, a fin de que escudriñemos juntos la sapiencia presente en estos jurados encargados de asignar estos premios.

 

 

 

Ganadores del premio Magón
Año Ganador Profesión
2018 José Sancho Escultor
2017 José León Sanchez Escritor
2016 Juan Jaramillo Antillón Médico y Escritor
2015 Rónald Bonilla Poeta
2014 Miguel Ángel Quesada Pacheco Lingüista
2013 Julieta Dobles Poetisa
2012 Yadira Calvo Fajardo Escritora
2011 Rodrigo Gámez Lobo
Rogelio López
científico
bailarín
2010 Ólger Villegas Escultor
2009 Virginia Pérez Johnston artista y curadora
2008 Rafael Ángel García Pintor
2007 María Eugenia Dengo Educadora
2006 Laureano Albán Poeta
2005 Eugenio Rodríguez Vega Historiador
2004 Carlos Aguilar Piedra Arqueólogo
2003 Hilda Chen Apuy Espinoza culturóloga y escritora
2002 Rafael Ángel Fernández Piedra Pintor
2001 María Eugenia Bozzoli Vargas Antropóloga
2000 Benjamín Gutiérrez Sáenz compositor y pianista
1999 Alfonso Chase Escritor
1998 Daniel Gallegos Troyo dramaturgo y novelista
1997 Jorge Charpantier García Poeta
1996 Julieta Pinto Escritora
1995 Lola Fernández Caballero Pintora
1994 Carlos Enrique Vargas Méndez Compositor
1993 Carlos Meléndez Chaverri Historiador
1992 Néstor Zeledón Guzmán Escultor
1991 Arnoldo Herrera González Educador
1990 Dinorah Bolandi Jiménez Pintora
1989 Fernando Centeno Güell pedagogo y poeta
1988 Guido Sáenz González pintor, músico
1987 Luis Ferrero Acosta Ensayista
1986 Carmen Naranjo Escritora
1985 Alfredo Cardona Peña Escritor
1984 Arturo Agüero Chaves filólogo y poeta
1983 José Basileo Acuña Zeledón Poeta
1982 Juan Manuel Sánchez Barrantes Escultor
1981 Manuel de la Cruz González Luján Pintor
1980 Isaac Felipe Azofeifa Escritor
1979 Rafael Obregón Loría Historiador
1978 Lilia Ramos Valverde escritora y maestra
1977 Rafael Lucas Rodríguez botánico y dibujante naturalista
1976 Alberto Cañas Escalante Escritor
1975 Joaquín Gutiérrez Escritor
1974 Teodorico Quirós Alvarado pintor y arquitecto
1973 Francisco Zúñiga escultor y pintor
1972 León Pacheco Solano Escritor
1971 Juan Rafael Chacón Solares Escultor
1970 Francisco Amighetti Ruiz Pintor
1969 Luis Felipe González Flores Historiador
1968 Fabián Dobles Escritor
1967 José Marín Cañas Escritor
1966 Carlos Luis Sáenz Elizondo Escritor
1965 Carlos Luis Fallas
Hernán Peralta Quirós
escritor
historiador
1964 Carlos Salazar Herrera escritor, escultor, grabadista
1963 Julián Marchena Poeta
1962 Moisés Vincenzi Pacheco filósofo y escritor

[i]

Con los tiempos que corren, posiblemente, un vate como  Julián Marchena,  o escritores como Carlos Salazar y Calufa, de quienes se dicen eran de sostenido apetito y pésimos cocineros,  jamás estarían hoy entre los galardonados por el Ministerio de Juventud, Cultura y Deportes (MJCD), por motivos obvios. Ninguno de ellos y muy pocos del medio centenar de premiados presentan, curriculum vitae culinario extraordinario, como para pensar que están a la altura y las exigencias de la actual,  “universal” y “moderna” alma costarricense.

Está claro para el ministerio del ramo, que  ese “fuego rebelde” llamada la cultura, en el  “Magón” 2019 se reconoce está presente  en la señora chef Isabel Campabadal, sintetizando los esfuerzos por rescatar nuestra  “cocina doméstica” y el “arte” del buen comer. Además de  “…reconocer y fomentar la calidad de la producción agrícola…”. [ii]

La pregunta de rigor, me imagino ya está dando vuelta en sus cabezas, es qué carajo ¿es cultura? Pues bien, dependiendo  de la época en que estemos o  el lugar ocupado socialmente, cultura es “todo” y es “nada”. En lo que, sí tal vez,  encontramos algún grado de coincidencia, es  que la “cultura” siempre reflejará la visión de mundo, los gustos,  la aceptación o el  rechazo de los valores en ella implícita, por parte de la élite que nos “conquista”,  tratando de ponernos a su servicio, sin que nos salgamos de la cancha marcada con antelación. Marx [iii] partió de  las  “relaciones de producción”  para significar la reproducción de esas relaciones sociales que, en última instancia, nos  permiten “moralizar” o “frivolizar” la desigualdad de clases. Este proceso, jamás explicado por el simplista análisis de la “ideología” de algunos ilustres marxiólogos, está presente cuando un grupo dominante se legitima sobre los dominados; cuyos miembros en su mayoría terminan creyendo que son parte de esta minoría, copiando sus  gustos y negándose a que son los  “nuevos conquistados”.  De esta manera, ven en esa minoría  referente  como “natural” y hasta “necesario” su manera de actuar, pensar, repartir justicia, resolver sus contradicciones etc. sobre ellos,  mayoría casi inerte y conformista por excelencia.

Así, por ejemplo, el  agricultor de cebollas, col o tomates,  es desaparecido de la realidad social y económica (la realidad concreta, dirigida a los productores, se define en el Banco Central, en el Ministerio de Hacienda, la Contraloría General de la República etc.),  negándoles caminos decentes, precios justos etc., pero muchos de ellos se perciben y se miran como parte especial  de la “cultura” nacional,  cuando se enteran por las noticias de Ignacio Santos o La Nación, entre otros, que están siendo “reconocidos” y “homenajeados” por  la cocina tradicional y el fomento agrícola a través de alguien, que seguramente,  por carecer de una parcela en San José,  nunca sembró un rábano, un repollo ni arrancó una yuca para dar de comer a sus hijos y esposa. El agricultor que está perdiendo su parcela con el banco o es víctima del intermediario, se siente  representado por una de las mejores “chef” del país y ahora reconocida como premio “Magón” por   el MJCD en recuerdo del   escritor Manuel González Zeledón (“Magón” 24/12/1864 – 29/5/1936), quien para regalarnos sus cuadros costumbristas se codeó  una y otra vez  con los fogones de tinamaste y esos  bonachones seres humanos llenos de  tierra.

a).- Un menú para el “Magón”.

No está demás, por tanto, confeccionar para usted un menú popular, saludable y fácil de elaborar para aspirar en algún momento a un “Magón”, siempre y cuando los productos agrícolas sean sembrados directamente por el aspirante, con lo cual estoy seguro que Manuel González Zeledón ni Carlos Luis Fallas, Joaquín Gutiérrez, Isaac Felipe Azofeifa, entre otros galardonados del pasado,  se disgustarían. Al contrario, se van a sentir honrados, porque quienes ni han sumado ni restado desde la llegada del europeo son, por fin, protagónicos de su propia historia y empoderados para  trascender como conciencia nacional.

El primer paso de este menú es: 1.-.Sembrar y  cosechar todos los alimentos que a continuación se necesitan. Pueden cultivarse incluso en macetas. 2.- Una vez extraídos de la tierra y lavarlos, apartar   una col (repollo) de medio kilogramo aproximadamente, un tomate grande y dos limones Mesina. Paso 3.-.Partir  a la mitad el col y el limón; el tomate hágalo en rodajas lo más delgadas posibles. Paso 4.- Trate de hacer el col en finas tiritas. Una vez hecha esta tarea deposite las tiritas en un platón grande, eche limón y sal a su gusto (preferiblemente sal marina de la marca “El sabor”). Revuelva todo  con sumo cariño y ponga encima las rodajas de tomate; sírvalo a los invitados con tortillitas tibias, preferiblemente, para comer en gallitos con agua dulce caliente. Por último, averigüe la fecha que el MJCD abre el período de recepción de postulante al premio nacional de cultura “Magón” y envíelo en sobre cerrado con mucha fe.

Sí por esas cosas de la vida – no del jurado- no resultase premiado, recuerde que de todas formas ya es parte importante de la “onda cultural” del país. Ha contribuido con poner un grano de arena en la cuota nutricional de Costa Rica, pues el tomate, el repollo y el limón  son ricos  en fibra,  tienen  pocas calorías e hidratos de carbono, abundan en vitaminas A, C,K, E y B y minerales como el azufre, hierro, potasio, calcio; contienen también ácido fólico, ayudándonos   a combatir los resfriados. Eso decía la abuela Rosa, quien pedía nos cercioráramos que entre los comensales  nadie padeciese  de gastritis ni del colón.

La abuela murió en Montes de Oro, sin saber que en el siglo XXI pudo aspirar a un “Magón”, al menos eso pienso; ella cultivaba en su solar el repollo, los limones, los tomates (el italiano y otro chiquitillo que decía era salvaje), las lechugas, la yuca, los tacacos, entre otros, aunque reconozco que no tenía el caché ni la cuchara de Campabal. ¡ A Dios lo que es de Dios y al César lo que es del César¡ A lo mejor abuelita  no merecía el “Magón”- recuerde que eran tiempos sin televisión ni  facebook o youtube – sí doy fe que mereció la “bandera azul” por su “corazón ecológico”. Ella ya nos decía que la bolsa vieja de manigueta era mejor que el “cochino plástico”. Nunca recibió del tramero, el finado José Mesén, ni siquiera la más pequeña bolsa plástica. ¡Esa basura de plástico, usted  lo quema, es hediondo y vea, siempre hace basura ¡, solía despotricar.  Tampoco aceptó jamás alimentar sus veintiuna gallinas y tres cerditos con afrecho o semolina, pues juraba  que ya eso venia contaminada desde la fábrica con cosas raras que hacían  crecer en “un monazo” a sus alimentados, terminando con inexplicables enfermedades o muriéndose de gordura en un rincón del chiquero. ¡Ese es el negocio, vea como se murieron  los borregos de Chani Herrera¡ refunfuñaba cuando recordaba a quien distribuía en el pueblo los alimentos mencionados.

b).- ¡ Dios sigue muerto ¡: decadencia de la “cultura” occidental.

 

 “Dios ha muerto”[iv]. Sí, con esta  frase de Nietzsche (filósofo, lingüista, músico y traductor 15/10/1844- 25/8/1900), toda cultura  oficializada nos embrutece,  nos  mata el “dios rebelde” que llevan los hombres y mujeres decididos a reencontrarse con la parte humana que nos enseña a “ver” y no a “mirar” (los que otros quieren que miremos), este “mirar”  simplemente nos hace  “vivir” , “vegetar” en este mundo, en el mejor de los casos, sin empujarnos  a “trascender” hacia estadios superiores y más nobles que impregnen y repercutan  en la conciencia de otros.

 De esta manera, la llamada “cultura” occidental,  a partir del siglo III de nuestra era, quemó sus barcas y acuchilló las fuerzas de los pueblos como agentes transformadores. Desde entonces, no han inventado ningún otro Dios en serio (solo hay reutilizables que como gran cosa empujan  a los débiles a unirse para que aprendan a autoacuchillarse y así neutralizarse entre sí, sintiéndose fuertes), que diga a los hombres y mujeres cómo ser libre,  curiosos, en constante crecimiento  y escudriñadores   como niños, sí quieren vivir en este el reino.[v] Por el contrario este viejo Dios globalista llamado capitalismo enfrenta a hombres y mujeres del reino por un (uno solo) puesto de trabajo, a ambos los trata como miserables, hambrientos y despreciables. Logró despojar  a los pueblos de  la “chispa” y la  energía primigenia para no  ir a rescatar la dignidad  del gran fuego del Prometeo. Los acuchilladores de ese Dios de ayer y hoy eliminan la población mundial que no pueden controlar por  ser su amenaza planetaria latente,  sí no logran su control cuando acabe este siglo. Quienes  alguna vez defendieron la “lucha de clases” como esperanza para liberarse del capitalismo hoy, cómodamente están a pie cruzado  y desde la tevé hogareña o su curul lustrado todos los días,  ven en el discurso de género   hecho a galillo rajado la exigencia de   “reproducir” hombres con hombres y mujeres con mujeres, esta “miseria de la   filosofía” del cambio los entretiene  y mantiene ocupadísimos; mientras la fuerza infinita e incontrolable para ir a librar de la rapiña a Prometeo, se desgasta y se esfuma entre quienes padecen hambre y sus derechos humanos son borrados de las Constituciones. Así enfrentarían  a la moderna milicia romana, bajando el “maestro hombre” de un  madero cambiado cada vez que caen en despiste de este tipo,  por quienes, precisamente, lo divinizaron para  acuchillarlo luego.

En esta  inconciencia social ningún contenido o manifestación del pueblo, que no sea “corronga”[vi], cabe en la cultura y la política del pequeño país de 51.000 kilómetros cuadrados y económicamente diseñado en los últimos años  para depender de otros y “lavar” dinero  un 22% dentro de su economía[vii]. Las élites acá y allá  convierten a sus hileras incontables de esclavos en productores de antivalores políticos, jurídicos, culturales, deportivos, etc.   La persona,  con ello la cultura, pues ella es intrínseca a aquella, se tornan autómatas y, en la búsqueda de esa  materialidad terrena, de recambio y basura, surgen  pobres Prometeos que se sienten libres, cuando en realidad sus apegos impuestos disimuladamente como  arquetipos sociales solo  frivolización dejan a  su paso.   Por eso, en el “Anticristo”, Nietzsche tiene otra afirmación provocadora y demoledora: El cristianismo, como se le entregó a Constantino y se ha venido redimiendo en los distintos imperios, quedó sin alas, sin imaginación,  “ofrece todo y no da nada”[2], dice, comparándolo con las otras creencias universales que, quiérase o no, tienen incidencias innegables en eso llamado “cultura”.

 ¿Qué de malo hay reconocer como  “arte”  una buena ensalada? ¿O a futuro, el fisiculturismo como expresión cultural profunda de “cuerpo”, “alma” y “mente”?. En el mundo de la frivolidad todo cabe y es vendible. Es la misma belleza “estética” –momentánea y recambiable- contenida en las luces  multicolores de la noche de cualquier país del mundo, cuando bombas “bonitas” e “inteligentes” de la civilizada cultura occidental caen sobre la cabeza de niños, mujeres y  ancianos dentro de una urbanización,  hospital o escuela.

El ser  humano, despojado una vez de su dignidad y libertad, allá y acá,  vale menos  que cualquieras de esos proyectiles “tan inteligente” y culturalmente “bonitos”, pues ya desaparecieron  su espíritu de rebeldía, su capacidad de pensar y transformar (“ver”, “sentir”) y no de “mirar” con las anteojeras de la frivolidad. El maestro Eduardo Galeano, siempre lúcido, en algún momento visualizó que la preocupación de los derechos humanos y la democracia de las élites en Medio Oriente escondían el atraco y el robo de recursos que Occidente, en su declive desesperado en todos los campos, requiere como oxígeno. “Las bombas inteligentes, que tan burras parecen, son las que más saben. Ellas han revelado la verdad de la invasión. Mientras Rumsfeld decía: Estos son bombardeos humanitarios, las bombas destripaban niños y arrasaban mercados callejeros[viii] .¿ Alguna duda?

3.- La función de la ideología en la cultura costarricense: Recordando que el premio “Magón“  2019 se otorgó por “una vida dedicada a la investigación, divulgación y puesta en valor del patrimonio culinario del país”, el MJCD mira en la  chef,   Isabel Campabadal Herrero, una manera no solo de reconocer los esfuerzos citados por la premiada, sino una manera  de  “dignificación”  de  ingredientes y prácticas de la cocina tradicional, convirtiéndose ella en “pionera y referente que abrió camino a nuevas generaciones de chefs costarricenses”. “Porque su labor ininterrumpida, ha contribuido a dignificar la cocina tradicional doméstica femenina, a reconocer y fomentar la calidad de la producción agrícola, a revitalizar las manifestaciones de diferentes regiones del país, a formar comensales y profesionales, fomentando la gastronomía como un arte que expresa gran diversidad de historias e identidades”[ix], ¿Cuánto hay de sinceridad (realidad concreta) por parte de las élites  y cuánto de ideología[x] (de falsedad) en tales dignificaciones y referencias para nuestra  futuras generaciones?

Sí nos atenemos a la distribución de  tierra en nuestro país y la tradición agrícola, el jurado otorgante de dicho premio, rindió  homenaje sin decirlo, a los grandes cafetaleros, que siguen estando entre los  principales sectores ligados  a la tierra. Diversos datos oficiales  encontraron   60. 626 fincas con actividad principal agrícola, en su mayoría dedicadas al cultivo de café, actividades hortícolas, cultivo de banano, palma aceitera y caña de azúcar. Precisamente los cafetaleros, según cuenta la historia oficial, tienen una gran influencia en la cultura patria. Dieron en su momento  al “pueblo costarricense” el flamante Teatro Nacional, donde  ningún hijo de vecino ingresaba en caites o con vestimenta informal.

A la ministra Durán posiblemente olvidaron decirle a la hora de leer el veredicto que los  cantones con mayor número de fincas agrícolas son Pérez Zeledón (6 288), San Ramón  (2. 650) fincas y Coto Brus (2. 635). Específicamente para la caficultura se registraron 22 961 fincas.[xi] Menester es indicar además  que la agricultura familiar en Costa Rica  no está necesariamente en la capital ni en los sets televisivos, pues según en 2013, un 38% de la población costarricense vivía en zonas rurales, en las  cuales, entre 200.000 y 250.000 personas se dedicaban a actividades agropecuarias donde, paradójicamente, se concentraba  un 26,5% de la pobreza, frente a 17,4% del área urbana, según  la Encuesta Nacional de Hogares de 2013. La producción de la mayoría de los agricultores familiares es para el autoconsumo, pero también hay algunos productores que venden sus productos en las ferias del agricultor, las cuales se organizan semanalmente en diversas comunidades del país, mientras que otros venden en el Centro Nacional de Abastecimiento y Distribución de Alimentos (CENADA), a intermediarios y a diversas empresas. La agricultura familiar debe enfrentar diversos obstáculos: escasos recursos económicos para  productores, falta de diversificación de la producción agrícola,  falta de excedentes para vender, falta de acceso a la tecnología, inexistencia de infraestructura (como malos caminos), los bajos precios de los productos agropecuarios y la competencia desleal por parte de cadenas de supermercados. Una multitudinaria marcha de productores agrícolas a principios de 2020, realizada con aperos de labranzas por San José,  a fin de  que los bancos dejasen de rematar las parcelas de los campesinos[xii] refleja  que la situación agropecuaria está muy lejos de ser dignificada por un premio Magón. En el mejor de los casos, sería un reconocimiento a los grandes bananeros y cafetaleros, entre otros, como grupos determinantes en la economía local.[xiii]

Debe recordarse además las tres décadas seguidas de inmisericordes ataques al agro costarricense, lo cual provocó en los años recientes que el 69% del maíz que nos comemos venga del exterior; el 73% de los frijoles también son importaciones, así como el 43% del arroz se compró en el extranjero. La ideologización de los premios nacionales, concretamente el “Magón”, lejos de dignificar al campesino vendría a encubrir la dependencia alimentaria de que somos víctimas y la renuncia oficial a la soberanía y la nutrición nacional. Oculta la estructura endeble para garantizar alimentos a la población en caso de desastres naturales en los países vendedores de nuestros alimentos. El VI Censo Nacional Agropecuario (2014) encontró que de las 93.017 fincas agropecuarias censadas el 41,7% del territorio nacional se dedica a actividades agropecuarias. De las 93.017 fincas agropecuarias censadas  solo un 8,4% (7.846) están dedicadas a la producción de granos básicos y tan sólo un 4,8% (4.515) están consagradas a la producción de hortalizas[xiv]. Los pequeños y medianos productores agrícolas, en virtud de estos datos puestos dentro de una realidad concreta, están al otro lado del péndulo, como para pensar que la ganadora del Magón 2019 representa sus intereses. Por el contrario, la mayoría de los agricultores, deben sobrevivir frente a la falta de  políticas oficiales para  rescate  de la dignidad y la soberanía alimentaria, arrancada como queda aquí patentizado por la élite en todos  los gobiernos,  desde que la administración del socialdemócrata y ex dirigente sindical, Luis Alberto Monge, aceptó el Primer Ajuste Estructural de la Economía (PAE I). Desde entonces, se renunció a cualquier modelo de participación ciudadana y empoderamiento del pueblo en materia socioeconómica. Aunado a lo anterior está la  corrupción, la  impunidad, el tráfico de influencia y el “lobby” descarado; con ley o sin ella,  creando nuevos estamentos  al margen de la legislación o dentro  de ella. Las vías rurales, por donde ni banqueros, financistas o exportadores transitan, están en pésimas condiciones; pues sí contratan sus arreglos,  el precio final cuesta tres o cuatro veces al valor de la licitación inicial. ¡Todo es normal para estas élites ¡

La peligrosísima ruleta rusa con que se juega cuando una nación depende alimentariamente de otros países, llevó a los Estados Latinoamericanos  y el Caribe (CELAC) – Costa Rica está al margen de este grupo y pertenece al del Secretario de Estado norteamericano, Mike Pompeo, denominado de Lima[xv]–  proponer  erradicar el hambre en sus respectivos Estados.  Actualmente, a diferencia de nosotros, se comprometieron a garantizar la seguridad alimentaria y nutricional a través de una estrategia de erradicación de la  pobreza. Para ello promueven  mecanismos de cooperación entre ellos  y FAO, fundamentados en  cuatro pilares de la seguridad alimentaria y nutricional (disponibilidad, acceso, estabilidad y utilización).[xvi]

A  MANERA DE CONCLUSIÓN

El pobre “Magón”, los spaguettis y la salsa  a la boloñesa: A Manuel González Zeledón el universo lo premió mucho antes  que la elite económica descubriese los beneficios de su entrega a los demás, premiando  la “cultura” de ella, pues  él  durante toda la vida fue capaz de ennoblecer nuestra alma, apartándola de los que algunos llaman “instintos primarios”. Así que él  vino al mundo un  24 de diciembre de 1864 y murió el 29 de mayo de 1936, fiel a lo que pareciera un destino marcado como eterno viajero y un enriquecedor de nobles espíritus, durante sus 74 años de travesía por esta dimensión, a través de las letras y otras manifestaciones que nos ayudasen a “ver” y no simplemente a “mirar”  la Costa Rica de su época y la que están borrando para las futuras generaciones[xvii].

Abrazó por un largo período la representación diplomática de nuestro país en el exterior; más sin embargo sus obras  retratan la vida y personalidad de nuestros pueblos. Su cercanía con periódicos como “La Patria” y “El País” sirvió para que fuese parte de los forjadores de la “cultura”, tal como se concibe  este vocablo. Empero “Magón”, cariñosamente así llamado, jamás imagino que aquella comida para “pobres” de aquella época – picadillo preparado por la Toribia de su cuento: “¿Quiere usted quedarse a comer?”  (1896) -, un siglo y pico después se convertiría en algo  ya no  cocido en fogón de piedras encenizadas y leña, sino en un delicioso spaguetti con carne de ternera, albahaca, apio, cebolla y otras delicatesen guardadas con recelo por todos los chefs internacionales, cuando cocinan a todo vapor desde un estudio de televisión.

Quienes  conocen de alta  cocina en el MJCD saben  que los tiempos modernos exigen rapidez, pues todo es pasajero y degradable. Nada más  adecuado para la “cultura” del recambio y el desecho que esa comida italiana fascinante, de buen sabor y fácil preparación: el spaguetti.  ¿Qué tal un buen plato de esos fideos a la boloñesa, a la marinera, a la carbonara o con albóndigas, en lugar de picadillo de plátano,  cuya cáscara mancha nuestras  manos? ¡Wow¡, exclamaría, posiblemente, uno de esos periodistas y expertos de la “cultura del spaguetti” – con el perdón  de los segadores de trigo-  dentro del actual gobierno, del que pasó  y  del que viene, a partir de 2022.

Los defensores de nuestra “cultura” Occidental – ni quienes  de ella quieren distanciarse- tienen toda la culpa del descuadre civilizatorio emprendido. Alejarnos de las cosas que nos incomodan para rescatar y desarrollar el “sentir” compasivo – no el del pobrecito, sino el que enciende la pasión-,  en lugar de ese monstruo  egoísta presente hasta en la envoltura plástica de los spaguettis, cuya tarea encargada   es apagar todo dándonos, a cambio,  una falsa sensación de bienestar. ¡ No es fácil dentro de una “cultura” decrépita¡ . Implica no solo sembrar la mata de plátano, sino cortar su racimo y pelar la dura cáscara de su fruto, negándose la gente a “ver” el mágico esoterismo   del crecimiento de una  llama transformadora del todo, prefiriendo así la frivolidad y que  les destrocen los instintos de crecimiento interior. Así, su anulación   como persona, está cantada, pero no importa, porque siente satisfacción. Esta satisfacción, no se trata, pues  de imponer, por ejemplo, a todos hablar dos y tres idiomas, porque la OCDE quiere la “prosperidad” de quienes ya conocemos y serviríamos en este entresijo social,  como un número más: repleto de fuerza interior, pero bajo control absoluto de otros. Ser bilingües es un salto cultural, sí rescatamos también las lenguas autóctonas regadas a lo largo y ancho de nuestro territorio; sí no convertimos las universidades públicas pagadas por nuestro pueblo en vulgares maquiladoras y la enfermedad  y el dolor ajeno lo sacamos del callejón del “gasto” y el “negocio”. Sí no empoderamos al campesino que está perdiendo su parcela, a las masa de “descamisados”, como llamaba en su tiempo  Evita Perón a quienes el salario ya no alcanzaba ni para reproducir su fuerza de trabajo. A esos jóvenes entre los 18 y 30 años cuyas escuelas y liceos se estaban cayendo cuando fueron niños y asistieron a una educación estatal que ya dejó de ser de calidad, sí es supuestamente pública y gratuita. Eso  entiendo por cultura, por realización humana y por dignificación. Contrariamente nos puede suceder la tragedia sufrida en una lejana nación – a ningún ciudadano del mundo dese- que invitó a todos los súbditos para festejar un premio que las selectas Cortes del rey entregarían como justo reconocimiento a los labriegos de la comarca, despojados de sus tierras por los bancos, sin caminos, ni semillas, azolados por productos transgénicos  a precios de regalo; pero al fin y al cabo declarados ilustres personajes forjadores de “cultura” de ese lejano reino.

Cuentan que ese día los bufones del palacio salieron en la mañanita a la calle con enormes y llamativas pancartas a informar a todos los pobres diablos que  habían perdido toda capacidad de rebelarse,  la buena “nueva” de que los productos del campo serían incorporados al menú diario de las Cortes del rey. Quienes lustraban los calzados de ese  abolengo refugiado entre jardines, piscinas, coplas nocturnas y conmovedores declamaciones de  vates  no dejaban de insistir a través de viejas bocinas ampliadoras del   sonido hacia los cuatro puntos cardinales, que el día de la entrega del certificado a tan nobles súbditos, por orden del rey y la Corte habría comida gratis para todos los invitados especiales, el coñac de costumbre, música de arpa y todos tendrían acceso directo a  peroratas ilustradoras con escritores, novelistas, escultores, pintores, entre otros, invitados personalmente  por el rey como forjadores de cultura y ciencia en las distintas áreas del saber y la realización humana.

Advertían hasta la saciedad de que el cocido de todos los alimentos esa noche estaría a cargo de expertos  internacionales en cocina portuguesa, española e italiana. Por cierto, preso de la emoción, a  uno de estos animadores pagados a  se le escapó decir que entre los invitados ya confirmados estaría una campeona mundial en spaguettis. ¡Wou¡ ¡ Qué ricos son¡

”Magón”, lo lamento, en serio¡ ¡No merecías un final de cocina!

NOTAS

[1] Recuperado de www.wikipedia.com

[2] Medrano Ezguerro, Juan Manuel; “Nietzsche ante el fenómeno cristiano”; rescatado en https://biblioteca.unirioja.es/tfe_e/TFE000197.pdf

[i] Tomado de Welkepedia.

[ii] Periódico digital Crhoy.com 10/2/2020

[iii] Marx, Carl (n 5/5/1818- m 14/3/1883), siempre tuvo claro que la superestructura económica determinaba las condiciones materiales y espirituales en quienes eran destinatarios de la ideología, presente y transmitida por   los diversos ámbitos del Estado burgués. Para un mayor ahondamiento consultar: https://youtu.be/Hmrjs2_CzqY, “Crítica a la ideología alemana”: https://youtu.be/pvuAW7kGcvE y El estado:  https://youtu.be/lx07xjkgzb0.

[iv] Nietzsche, F. en La Gaya ciencia –Die  fröhliche Wissenschaft, 1882. En este sentido ver demás el “Anticristo”. La crítica del autor está encaminada hacia la forma que asesinan la esencia trascendental de la conciencia transformadora del hombre para reducirlo prácticamente a nada por el materialismo que se veía venir con el ascenso del capitalismo. Por eso Nietzsche habla incesantemente en varias de sus obras  que han  “acuchillado” a ese Dios (no  el religioso, pues este filósofo defiende la espiritualidad como fuerza renovadora del ser – nada que ver con un Dios religioso que se goza con sacrificios humanos, castiga y hace guerras-  sin que en 1800 años hayan inventado otro. En “Así habló Zaratustra”,  libro escrito entre 1883-1885  este pensador alemán que le tocó vivir el ascenso del industrialismo, el asalto armado de Africa por los países esclavizadores y las luchas en América a raíz del despojo llevado a cabo por España, Portugal e Inglaterra, pone hablar poéticamente al profeta del antiguo Irán, sobre el camino del hombre y sus formas de auto esclavizarse.

[v] Nietzsche, F. en La Gaya ciencia –Die  fröhliche Wissenschaft, 1882. En este sentido ver demás el “Anticristo”. La crítica del autor está encaminada hacia la forma que asesinan la esencia trascendental de la conciencia transformadora del hombre para reducirlo prácticamente a nada por el materialismo que se veía venir con el ascenso del capitalismo. Por eso Nietzsche habla incesantemente en varias de sus obras  que han  “acuchillado” a ese Dios (no  el religioso, pues este filósofo defiende la espiritualidad como fuerza renovadora del ser – nada que ver con un Dios religioso que se goza con sacrificios humanos, castiga y hace guerras-  sin que en 1800 años hayan inventado otro. En “Así habló Zaratustra”,  libro escrito entre 1883-1885  este pensador alemán que le tocó vivir el ascenso del industrialismo, el asalto armado de Africa por los países esclavizadores y las luchas en América a raíz del despojo llevado a cabo por España, Portugal e Inglaterra, pone hablar poéticamente al profeta del antiguo Irán, sobre el camino del hombre y sus formas de auto esclavizarse.

[vi] Morales, Carlos; véase la obra “Los Hechiceros del siglo XX”, además: “El periodismo costarricense está destruido” rescatado en https://www.taringa.net/+noticias/el-periodismo-costarricense-esta-destruido_15ubq3. El ensayista y escritor costarricense utiliza el vocablo “corrongo” como sin trascendencia, frivolidad espantosa, superficialidad insultante.- https://www.taringa.net/+noticias/el-periodismo-costarricense-esta-destruido_15ubq3. Ver además en esta línea:  Nuñez Oliva, Oscar: “Literatura leve y corronga”, Ancora 14 de enero 2001).

[vii] Vargas B, Albino; ¿Es que acaso Costa Rica es una narco-economía? 7/2/2020 Rescatado en: https://www.larepublica.net/noticia/es-que-acaso-costa-rica-es-una-narco-economia

[viii] Galeano, Eduardo. Rescatado en: https://akifrases.com/frase/144543

[ix] Semanario Universidad 5/2/2020.

[x] Respecto al concepto de “ideología” acá presente véase Marx, Carl y/ Engels F.; “la ideología alemana”, ediciones cultura popular, México, 1978).

[xi] VI CENSO Nacional Agropecuario pág 15, rescatado en: http://www.inec.go.cr/sites/default/files/documetos-biblioteca-virtual/01._atlas_estadistico_agropecuario_2014.pdf

[xii] Umaña, Paula: noticias Repretel,27/1/2020).

[xiii] Informado en Ameliarueda.com 18/11/15 09:28 AM

[xiv] Ver Vigésimo Primer Informe del Estado de La Nación.

[xv] Pompeo, Mike: en su reciente gira por Centroamérica a mediados de enero de 2020 vino a reforzar sus lazos de amistad con el gobierno del presidente Carlos Alvarado, respecto a Nicaragua y Venezuela, cuyos sistemas políticos y económicos combate Washington. Visitó además Colombia.  (Rescatado en: https://www.info7.mx/seccion/bombardeos-aereos-dejan-69-muertos-al-oeste-de-irak/732484. Pompeo es el principal protector del ex presidente del parlamento venezolano en desacato, Juan Guaidó, y entre amenazadas veladas, exige se le reconozca como presidente interino, unas veces, o en funciones, en otras ocasiones, dentro de Venezuela. Guaidó, reconocido por el “Grupo de Lima”, acaba de ser vinculado con el “robo” de $116 mil millones de activos del estado venezolano desde que Estados Unidos insiste en un cambio de modelo en Venezuela, según dijo el vicepresidente Jorge Rodriguez en un alocución por Venezolana de Televisión, con ese montó hubieran entregado una caja mensual de alimento a cada ciudadano  durante 152 años o hubieran entregado 11 millones de viviendas (Rodriguez, Jorge: Venezolana de Televisión  15/2/2020;  a las 12 hrs:50 min, hora de Caracas . Ver también :Vicepresidente sectorial..: (rescatado en https://www.vtv.gob.ve/trama-corrupcion-jorge-rodriguez-guaido/)

[xvi] Sic en: Vigésimo Primer Informe del Estado de La Nación.

[xvii] Periódico La Nación: “Sicarios baratos facilitan comisión de homicidios 15/2/2020. Las autoridades “descubren”  “tarifas” del sicariato  que son entre ₡ 50.000 (menos de $100), ₡ 100.000 (menos de $200) y ₡ 500.000 ( poco más de $800. La mayoría de esta “nueva fuerza de trabajo” cuenta entre 18 y 30 años.

 

BIBLIOGRAFÍA CONSULTADA

Schonfield,  Hugjj: El partido de Jesús, ediciones Martínez Roca S.A, Barcelona,  España, 1988, 307 páginas,                           

Ambelain, Robert; el hombre que creo  Jesucristo;  ediciones Martínez Roca S.A, Barcelona,  España, 1991; 292 páginas.

Marx, Carl/ Engels, Federico: La ideología alemana(traducida por Wenceslao Roces), Ediciones de Cultura Popular,México,1978; 55 páginas.

Carrio,Genaro: Notas sobre Derecho y Lenguaje, editorial Abeledo- Perrot, Buenos, Aires, Argentina, 1972;  163 páginas.

Geiger, Theodor: Moral y Derecho. Polémica con Upsala (traducido por Ernesto Garzón Valdez), Editorial  Alfa, Barcelona, España, 1963; 199 paginas.

Bobbio. Norberto: EL problema del positivismo jurídico (traducido por Ernesto Garzón Valdez), Distribuciones  Fontamara  S.A, México; 1991, 121 páginas.

Hume, David: Tratado de la naturaleza humana. Ensayo para introducir el método del razonamiento experimental en los asuntos morales (traducción de Vicente Ciqueira) Calpe (colección Universal),Madrid, España, en Antología de “Axiología y Derecho”, Facultad de Derecho de la  Universidad de Costa Rica, para estudiantes de la cátedra de Filosofía, 1996, en biblioteca del autor.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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