(VIERNES 16 DE JUNIO DE 2023-EL JORNAL).

Por Carmen C.

Julia 12 de junio  2023

Querida amiga.

Ayer en la tarde en la Guarida de las Reflexiones, mientras observaba las gotas de lluvia a través de la ventana, con una vela encendida, el aroma del incienso y escuchando música de Mozart, llegaron a mi mente nostálgicos recuerdos de la celebración de los 50 años de Julia.

Ese día, Julia esperaba con ansias a sus familiares, mejores amigos y al supuesto amor del momento, el cual encontró un sinnúmero de excusas para alcanzar su perdón en los siguientes días.

Pero como dice Julia:

—La vida siempre nos presenta momentos para escuchar nuestro corazón y en silencio con valor repetirnos las palabras no pronunciadas, aquellas palabras que no queremos oír porque duelen, pero son necesarias para reforzar esas experiencias de vida que nos dan sabiduría para tomar mejores decisiones, porque siempre se debe buscar la forma de lograr lo que se quiere. —

Julia a sus cincuenta años disfrutaba de los logros obtenidos, pero también había sufrido quebrantos de salud, pérdidas, ingratitudes, traiciones de amistades y viejos amores, Julia fue y sigue siendo una mujer alegre, positiva, fuerte, valiente, forjadora, incapaz de darse por vencida, pero sobre todo romántica, enamorada del amor y soñadora.

Y hablando de amores, muchos hombres, fuertes, atractivos, cariñosos inteligentes, románticos, detallistas, excelente amantes, despistados, aprovechados y agresores sumaban en el transcurrir de su largo camino y ese día ante la ausencia de su pareja pensó que había llegado el momento de ser feliz y renunciar por completo a ese tipo de relaciones sin compromisos ni  intenciones futuras y así levantando una copa de vino lo manifestó públicamente, pero  no contaba que tres años más tarde encontraría a su verdadero y gran amor ese compañero incondicional , amigo, esposo que con su actitud le hizo creer nuevamente que existen muchos buenos motivos para compartir en pareja, para ser feliz y disfrutar cada momento, y hasta hoy y por siempre será  su orgullo. Él es su Gadam

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