Inicio Deportes Guardiola el ...

Guardiola el aguafiestas

(MIÉRCOLES 15 DE MARZO 2023-EL JORNAL). Ser políticamente correcto tiene sus efectos y el de ayer de Josep Guardiola fue convertirse en un aguafiestas, al sacar a Erling Haaland cuando iba camino a hacer una historia mayor a la ya conseguida con los cinco goles al Leizipg.

Haaland, ese granjero noruego al que se le caen los goles por todo lado, le dijo sin tapujos a su entrengador que él quería seguir, quería seguir anotando, porque tenía en su memoria los nueve goles que le había realizado a Honduras con la selección juvenil de su país.

Pero en medio de la fiesta apareció Guardiola, el mejor técnico del mundo para algunos, y lo mandó al banquillo a falta de 28 minutos para el final.

A veces los entrenadores pecan de querer ser importantes y le ocurrió a Guardiola ayer: cómo justifica la salida de Haaland, no hay manera de hacerlo y de esa forma lo privó de un registro que quizá hubiese establecido un nuevo récord en Champions.

Valga la situación para reflexionar sobre el rol actual de los entrenadores: es muy importante, pero no tienen siempre que ser las estrellas. Guardiola, aunque no lo admita, de una u otra manera quiere ser la estrella, y ayer lo consiguió.

Algunos dirán que para cuidarlo, pero hay que replicar que cuidarlo de qué, de que anotase uno, dos o incluso tres goles más.

Era el partido perfecto para que Haaland volase tan alto como nadie habría imaginado, pero no, apareció el comisario del partido llamado Guardiola y lo envió a las duchas.

Cortarle las alas a la bestia no es buen augurio, y más adelante Guardiola se dará cuenta de su error. ¡Qué fácil es ser un aguafiestas!

Periodista, escritor y comentarista. Premio Nacional de Periodismo Pío Víquez. Esta columna se publica a diario en FxD y EL JORNAL

Artículo anteriorEl Papa Francisco dice que «la ideología de género es nefasta»
Artículo siguienteJulia sigue enamorada del amor

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí