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Cerrar la caja de pandora del arbitraje

(VIERNES 10 DE FEBRERO 2023-EL JORNAL). Estalló, una vez más, el arbitraje en Costa Rica, esta vez por un chat privado filtrado a través de un tercero, y la incertidumbre se ha apoderado del gremio, mientras cada cual busca sacar provecho de la situación.

Lo mejor que pueden hacer los referis, la Comisión de Arbitraje y los equipos, es cerrar la peligrosa e impredecible caja de pandora.

Saprissa, que puso el grito al cielo, por las expresiones de los árbitros en ese chat sobre Jeaustin Campos, se dio cuenta de lo riesgoso que es cavar sin saber qué buscar ni a dónde llegar y parece que quiere que las cosas vuelvan al punto cero.

Lo mejor sería que cada parte se comprometa a realizar lo que le compete y que se detenga el fuego cruzado de acusaciones, porque la situación no conduce a ninguna parte.

Mayor liderazgo de la Comisión de Arbitraje, donde a Randall Poveda, a ratos, le queda grande el puesto. Solo basta escucharlo dando declaraciones para confirmar esta aseveración. A los árbitros les compete, y empleo este término porque Jeaustin Campos, habló de incompentencia de Juan Gabriel Calderón en el clásico, prepararse cada vez mejor, incluso en las condiciones limitadas en que trabajan.

Y a los entrenadores, señores, concentrecen más en lo futbolístico, en que sus equipos sean capaces de ensayar salidas limpias, en que tengan buenas transiciones en mediocampo y en que sus delanteras manejen los mejores conceptos como los de tiempo y espacio.

Si cada parte involucrada en este conflicto –que puede conducir a la insensatez, con cambios de árbitros porque unos señalan, otros protestan y otros alzan la voz—se focaliza en cumplir con sus deberes, podremos recobrar un poco ‘esa normalidad’ para que el fútbol de Costa Rica mejore, dado que en el plano internacional hoy somos nada.

Y quien tenga duda, les recuerdo el 7 a 0 frente a España, y el ridículo en toda regla de la Selección en el debut de Qatar 2022.  

Periodista, escritor y comentarista. Premio Nacional de Periodismo Pío Víquez. Esta columna se publica a diario en FxD y EL JORNAL

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