F. Estévez.
(SAN JOSÉ, COSTA RICA, 15 DE AGOSTO, 2014-EL JORNAL). “Las noticias de la prensa nos enseñan todos los días un mundo absurdo y patas arriba que se ensaña contra la inteligencia, contra los más débiles y solo estimula la violencia. Por eso mi libro es un poco la indignación que he acumulado desde hace muchos años contra la pérdida de valores que comienza con la destrucción del idioma”, afirmó el escritor Carlos Morales la noche del martes 12 de agosto.
Para la presentación de su libro Palabras que el tiempo se lleva, el autor se hizo acompañar de los especialistas Arnoldo Mora y José Eduardo Mora, quienes analizaron la obra bajo una acertada conducción del periodista Manuel Emilio Morales, quien también intervino y auspició un animado debate con la sala completamente llena.
En la primera intervención, el Master en Literatura José Eduardo Mora, director de El Jornal, mostró unas fotos sobre la forma como los medios de comunicación degeneran la realidad y atropellan el idioma y el razonamiento de su público. “Con estas violaciones al periodismo responsable, están ayudando a que nos olvidemos de pensar”, dijo.
Por su parte, el doctor Arnoldo Mora, exministro de Cultura, entró a analizar el libro desde un ángulo ético y filosófico, encuadrándolo en ejemplos traídos desde la cultura griega y de la dignidad latinoamericana. Citó a Sócrates y a José Martí entre muchos otros pensadores. “Se trata de un ensayo socrático que rinde honor a una vida periodística muy valiente que está en su período de madurez y que nos recuerda que toda violencia comienza por el abuso del idioma”, aseguró.
El autor del libro explicó cómo lo construyó al paso de muchos años, apuntando palabras que sufren el embate de los tiempos en perjuicio de los valores que encierran.
Lo aproximó al movimiento europeo de Los Indignados, citó al M15 de España y al francés Stéphane Hessel. “Tal vez no tengamos muchas respuestas, pero sí tenemos muchas protestas que son absolutamente válidas. No tenemos suficientes sí, pero tenemos un no gigantesco. Estamos cabreados, como Beto Cañas”, aseguró.
Al cabo del acto se rindió homenaje a los nietos del autor, quienes figuran como dedicados del libro en la cuarta de forros.
Hubo un brindis que amenizó el conjunto Akus-ticos, de John Odio y Chepe Blanco.
Entre el numeroso público estaban varios exministros de gobierno, un exrector de la UCR, muchos catedráticos, escritores, poetas, periodistas y familiares del autor.
